ACERCA DE MÍ
¡Hola! Soy Lucía Siwy. Soy altamente intuitiva y sanadora desde pequeña aunque no me había dado cuenta hasta hace pocos años, ya que el entorno en mi niñez estuvo enfocado únicamente a talentos artísticos.
Estoy certificada con Nivel Máster en la modalidad COMPASSION KEYⓇ. Es una modalidad vanguardista para sanación emocional y de trauma.
Soy además Consultora en Duelo Gestacional, Perinatal y Neonatal, Violinista Profesional (mi biografía aquí) y también me he formado en Crianza Consciente.
Desde que me convertí en mamá he recorrido un camino de mucho autoconocimiento y crecimiento personal, en el cual profundicé hasta el fondo después de la muerte de mis otros dos hijos. El dolor de la muerte de un hijo es uno de los más grandes que podemos experimentar en la vida. Es un camino muy difícil. Tuve que aprender a re-conectar conmigo misma y con mi hija a pesar del trauma y ansiedad severas. He conocido en carne propia mucho sobre trauma, ansiedad, desconexión y al transitar mis duelos, el dolor removió de los escombros heridas emocionales que habían estado escondidas en mi subconsciente por décadas, y algunas que ni siquiera me pertenecían al venir de trauma trasgeneracional.
He sanado profundamente no sólo mis duelos, sino a mi niña interior y las huellas kármicas especialmente al descubrir la modalidad de sanación Compassion Key. Es por eso que ahora es parte de mi misión ayudar a otras personas en su camino de sanación con la ayuda de esta modalidad y de todos mis talentos intuitivos.
Actualmente vivo en Nueva Zelanda con mi amado esposo, mi hija maravillosa y con nuestras mascotas tan amorosas. Honramos, amamos, extrañamos y recordamos siempre la presencia de nuestros dos hijos estrella que partieron al Cielo el día que nacieron.
Aunque aún sigo en mi camino de sanación, puedo decir que tengo una vida feliz y la dicha de sentir cada vez más paz en mi corazón. Hoy puedo decir que no importa cuan grandes sean nuestras heridas, es posible sanar.
Soy Luz, soy Amante y Defensora de la Verdad, soy Mujer Empoderada, soy Esposa, soy Madre. Y sobre todo, soy HUMANA: algo que siento que como humanidad todos tenemos que volver a reclamar.